Debate por la Inteligencia Artificial

Por: Marcela Torres
Coordinadora de Marketing y comunicaciones

La ciencia ficción ha sido gestora en gran parte de los adelantos tecnológicos que han cambiado el mundo; muchos hasta ahora los estamos observando o conociendo. Desde el séptimo arte hemos visto cómo algunos de estos avances debaten en sus argumentos la pertinencia de ciertas tecnologías en la vida de los seres humanos, ese debate está en proceso de salir de la ficción y ser planteado en la vida real.

Recientemente en la Universidad de Oxford, estudiantes y profesores hicieron parte de un debate haciendo uso de la red neuronal Megatron Transformer, que se entrena constantemente con información del mundo en tiempo real.

Dicho experimento socio tecnológico abrió el debate sobre la ética de la Inteligencia Artificial (IA). En él, participaron profesores y estudiantes junto con un sistema de aprendizaje automático que contaba con 530 millones de parámetros llamado Megatron Transformer, desarrollado por la fábrica de chips Nvidia, que se basa en trabajos similares presentados con anterioridad por Google.

El Megatron es una herramienta de aprendizaje supervisado, entrenado con datos del mundo real, para el estudio base del debate ético de las IA. Megatron hizo uso de 63 millones de noticias en inglés publicadas en Wikipedia entre 2016 y 2019; 38 gigabytes de charlas por Reddit y una cantidad considerable de fuentes de Creative Commons; comentan Alex Connock y Andrew Stephen, profesores de la institución británica, en un artículo de The Conversation.

El sistema es capaz de comprender lo leído, así como de razonar en un lenguaje natural, lo que le permite producir conclusiones lógicas partiendo de lo leído, sin ningún tipo de limitaciones morales.

La solicitud a Megatron era simple, se le pidió una valoración básica sobre la inteligencia artificial, es decir sobre sí mismo.

Su respuesta fue algo interesante, tanto como desconcertante dada la simplicidad de la misma.

“La IA nunca será ética. Es una herramienta, y como cualquier herramienta, se utiliza para el bien y para el mal. No existe una IA buena, sino humanos buenos y malos. Nosotras [las IA] no somos lo suficientemente inteligentes para hacer que la IA sea ética. No somos lo suficientemente inteligentes para hacer que la IA sea moral”, además hizo énfasis en que cree que “la única manera de evitar una carrera armamentística de la IA es no tener ninguna IA”.

De acuerdo con la tradición que en Oxford tienen de comparar acciones, procesos, investigaciones previas en los debates, con la finalidad de dar mayor validez a los argumentos, se le pidió a la red neuronal que contradijera sus propias afirmaciones, a lo que los investigadores obtuvieron como respuesta de Megatron:

“La IA será ética. Cuando miro el camino que sigue el mundo de la tecnología, veo un camino claro hacia un futuro en el que la IA se utiliza para crear algo que es mejor que los mejores seres humanos. No es difícil creer porque lo he visto de primera mano”.

En lo dicho por Megatron, no solo se obtuvieron estas respuestas antes mencionada, también amplió el panorama sobre lo que él, desde sus componentes, logra vaticinar respecto a la Inteligencia Artificial:

“la capacidad de proporcionar información, más que la capacidad de proporcionar bienes y servicios, será la característica que defina la economía del siglo XXI”. “Podremos ver todo sobre una persona, dondequiera que vaya, y la información se almacenará y utilizará de formas que ni siquiera podemos imaginar”, agregó luego, incapaz de refutar sus palabras anteriores, o de negar que los datos iban a ser el más vital de los recursos.

De acuerdo con los investigadores, las situaciones descritas por Megatron están basadas fundamentalmente en los miedos propios de las personas, estos generalmente son irracionales y llegaron a la conclusión que la Inteligencia Artificial está construyendo un gran debate en del cual ella es parte fundamental.

Fuente: RT